Hablar de ética y gestión de la organización sanitaria supone reconocer el necesario equilibrio entre sostenibilidad, justicia y equidad. Significa, además, la búsqueda de la excelencia y un compromiso con la calidad y la mejora continua.

El Sistema Sanitario Público de Andalucía pretende que la mirada ética continúe impregnando cada una de sus acciones y contribuya, de forma activa, a que éste sea un sistema garante de los derechos de la ciudadanía y de los profesionales; corresponsable, participativo, solidario, seguro, flexible, abierto a las diferencias, justo y transparente.