Toda investigación exige, no solo el cumplimiento de la normativa vigente, sino también de los requisitos éticos que hacen más coherentes y sistemáticos los códigos y las declaraciones tradicionales sobre la investigación.
La investigación con seres humanos, así como con sus datos personales o muestras biológicas, debe realizarse conforme a distintos principios éticos que garanticen el respeto por las personas y la minimización de los riesgos y explotación, contribuyendo al avance científico y a la mejora del conocimiento.
La ética debe estar presente en todas las fases de la investigación, desde la planificación y la realización hasta la evaluación o la publicación de los resultados.